20 jaculatorias para elevar tu alma a Dios en todo momento
4 de junio de 2025

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Las jaculatorias son oraciones breves y fervorosas que permiten al fiel mantener una conexión constante con Dios a lo largo del día. Estas oraciones, recomendadas por los Padres de la Iglesia y practicadas por santos como Santa Teresa de Ávila y San Juan de la Cruz, son consideradas «balas espirituales» contra el mal y herramientas eficaces para fortalecer la vida de oración. Además, algunas jaculatorias otorgan indulgencias parciales o plenarias, como la famosa: «Jesús, María y José, asistidme en mi última agonía.»

«Las jaculatorias son oraciones breves que permiten mantenernos en la presencia de Dios a lo largo del día.»

Las jaculatorias son oraciones breves y fervorosas que permiten al fiel mantener una conexión constante con Dios a lo largo del día. Estas oraciones, recomendadas por los Padres de la Iglesia y practicadas por santos como Santa Teresa de Ávila y San Juan de la Cruz, son consideradas «balas espirituales» contra el mal y herramientas eficaces para fortalecer la vida de oración. Además, algunas jaculatorias otorgan indulgencias parciales o plenarias, como la famosa: «Jesús, María y José, asistidme en mi última agonía.»

A continuación, se presentan 20 jaculatorias que pueden ser recitadas en cualquier momento del día:

  1. Jesús manso y humilde de corazón.
    R. Haz mi corazón semejante al tuyo.

  2. Sagrado Corazón de Jesús.
    R. En Vos confío.

  3. Te adoramos, ¡oh Cristo!, y te bendecimos.
    R. Porque con tu Santa Cruz redimiste al mundo.

  4. Buen Jesús, amigo de los niños.
    R. Bendecid a los niños de todo el mundo.

  5. El Señor es mi pastor.
    R. Nada me puede faltar.

  6. Señor, auméntanos la fe.

  7. Señor, Tú lo sabes todo, Tú sabes que te amo.

  8. Creo, Señor, pero ayuda a mi incredulidad.

  9. Jesús, ten misericordia de mí que soy un pecador.

  10. Dulce Corazón de María.
    R. Sed la salvación del alma mía.

  11. María, Madre de Gracia, Madre de Misericordia.
    R. En la vida y en la muerte ampáranos, gran Señora.

  12. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros.

  13. Virgen María, llena de gracia, intercede por nosotros.

  14. Oh María sin pecado concebida.
    R. Ruega por nosotros que recurrimos a ti.

  15. San José, padre y protector de la Sagrada Familia, ruega por nosotros.

  16. San José, modelo de humildad y obediencia, intercede por nosotros.

  17. Espíritu Santo, fuente de luz.
    R. ¡Ilumínanos!

  18. Espíritu Santo, fuente de sabiduría.
    R. Guíanos.

  19. Espíritu Santo, fuente de amor.
    R. Llénanos.

  20. Espíritu Santo, dulce huésped de mi alma.
    R. Permaneced en mí, y que yo permanezca siempre en ti.

Estas jaculatorias, aunque breves, tienen un profundo poder espiritual y pueden ser recitadas en cualquier momento del día para mantenernos en la presencia de Dios y fortalecer nuestra vida de oración.

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